El 20 de abril de 2011 la sociedad Octium, SL, administrada por la esposa de Diego Torres, Ana Tejeiro, firmó un contrato de arrendamiento con la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FDCIS) por una embarcación de nombre Octium y matrícula 6ª BA-2-15-11, marca Elan. Por parte de Octium, SL firmaba Ana Tejeiro (la esposa), por parte de FDCIS Diego Torres como presidente.
Según consta en contrato el objeto de dicho alquiler era el programa Velas por la Vida, programa llevado a cabo conjuntamente por la FDCIS y Asociación Junts en Acció para acercar al mundo de la vela a personas con discapacidad.
El mismo día Miguel Tejeiro en nombre de FDCIS cedía el uso particular a Diego Torres. Lo cierto es que el titular de agencia ya era algo sesgado ("Diego Torres se benefició de una embarcación alquilada por la Fundación de Discapacitados que preside"), podemos imaginar como derivó el mismo en otros medios que difundieron la noticia de agencia. La cuestión es que la noticia no es falsa, simplemente una media verdad, como tantas otras en este caso.
El velero en cuestión es el velero particular del matrimonio Torres-Tejeiro, luego Diego Torres alquiló su propio velero a la fundación DCIS para llevar a cabo el proyecto Velas por la Vida, y se guardó su uso para cuando no fuera usado por el proyecto. Además, esta página de la web de la empresa nos muestra como el proyecto también es asumido como propio por Octium, SL. Vemos en ella también como el objeto último de Octium, SL no es el alquiler de embarcaciones, sino ser "un centro de investigación que quiere servir de foro de análisis y discusión sobre las estrategias de patrocinio, mecenazgo y acción social". El alquiler de la embarcación pues era una actividad adicional, no principal, de la sociedad.
Pero lo más lamentable de la cuestión difundida ampliamente en prensa no es su contenido, sino su motivación, pues ¿qué tiene que ver con el caso instruido por la vía penal? Su único objetivo es el sensacionalismo y amancillar la reputación de uno de los imputados, como tantas y tantas otras noticias que tampoco tienen nada que ver con la instrucción.